Siguiendo con el artículo de ayer, vamos a por las pautas tercera y cuarta.
Pautas de autocuidado para mantener una buen salud emocional durante el confinamiento (2):
3- Cuida tu salud emocional.
El equilibrio emocional no crece en los árboles, hay que trabajarlo. 
Dedica un tiempo diario a practicar técnicas de relajación o de meditación. Sus beneficios son innumerables y en las circunstancias actuales se hace más necesario que nunca establecer una práctica regular. Con 20 minutos al día serán suficientes. La excusa del «no tengo tiempo» ya no es válida. En Internet puedes encontrar muchos y variados métodos de relajación y meditación, se trata de ir probando hasta que encuentres uno que se adapte a tus gustos y necesidades.
Cuida extremadamente la calidad de tus pensamientos. Más que nunca es importante no dejarnos llevar por pensamientos derrotistas o ansiógenos que potencien nuestro estado de incertidumbre o tristeza. Todos somos más que conscientes de todo lo que ha cambiado para mal, de todo lo que podíamos hacer que ya no podemos…
Te doy 5 minutos para que te agobies y descargues la tensión, pero después…¡MANOS A LA OBRA!
¿Cómo lo hago?
Seguro que mis alumnos saben lo que viene ahora… Coge un cuaderno o 
unos folios o abre un archivo en tu ordenador (algo de esto tendrás, no me valen las excusas) y haz una lista de todas las cosas positivas que puedes aprender o que puedes aprovechar a hacer durante la cuarentena.
Sé que la lista es difícil, soy muy consciente. Es más fácil pensar en las cosas que nos faltan, pero no te dejes vencer tan pronto. Busca aquellas cosas que puedes sacar de esto, aquello para lo que no tenías tiempo y ya tienes. Es un buen momento para analizar las prioridades de nuestra vida, a qué hemos dedicado mayor tiempo en nuestras vidas y analiza qué es lo realmente importante. El equilibrio surge cuando las prioridades están bien distribuidas: Cuando lo más importante ocupa el primer lugar. ¿O es que ahora echas de menos abrazar a tu jefe? Imagino que no… Da a cada persona y a cada cosa el lugar que merece.
Anota en ese cuaderno cada día tres cosas que hayan ido bien o tres lecciones que hayas aprendido ese día y que quieras recordar.
Recuerda:
No es un diario para anotar desgracias, esas las recordamos de sobra sin ayuda de ningún cuaderno.
Es un diario en el que registrar lo que SÍ FUNCIONA, LO QUE HE DESCUBIERTO QUE ES REALMENTE IMPORTANTE, LO BUENO QUE HAY DENTRO DE LO MALO.
Te será muy útil ahora, y después… porque esto pasará créeme. Y nos iremos olvidando de lo que aprendimos, de lo importante, de nuestras prioridades,… y este diario te ayudará a tenerlo presente siempre que quieras volver a él. Así, cuando retornemos a la normalidad y poco a poco nos vayamos olvidando de todo lo aprendido, tendremos un magnífico recordatorio, escrito de nuestro puño y letra, de lo que es realmente importante y prioritario.
Si no sabes cómo hacerlo, mantente atento a las redes sociales, el próximo mes comenzaré a realizar cursos con clases online. En ellos podremos seguir aprendiendo, interactuar, charlar y volver a vernos o conocernos.
Una vez más… ¡NO HAY EXCUSAS PARA CUIDARSE!
4. Busca espacios diferenciados en los que puedas mantener tu intimidad.
Cuando vamos a pasar mucho tiempo juntos en un espacio reducido es muy importante que existan espacios diferenciados donde poder estar a solas. Para estar tranquilos, para leer, para calmarnos, para hacer aquello que nos apetezca, para escribir el diario,…
Recuerda que el crecimiento personal no nace entre ruido,sino del silencio, 
requiere de parar la actividad, de pausarnos, estar a solas y dedicarle un poquito de tiempo a pensar en nosotros mismos, en la dirección que estamos tomando y en lo que es realmente importante.
Es muy importante que este espacio también se lo demos a los niños. Ellos también necesitan aprender a parar, a reflexionar y a hacer su diario personal. Junto con las personas mayores son las que más están sufriendo las consecuencias del confinamiento y las que más deberíamos cuidar. El día tiene muchas horas, y seguro que encuentras un ratito para dedicártelo.
Por hoy, os dejo tarea más que suficiente para que vayáis poniendo en práctica. Espero haberos podido ayudar un poquito en esta aventura que estamos atravesando todos. Porque… nunca olvides que… ¡JUNTOS LO CONSEGUIREMOS! ¡YA FALTA UN DÍA MENOS PARA PODERNOS VER Y ABRAZAR!
¿Necesitas ayuda?
Si necesitas ayuda de un profesional para superar los estados emocionales derivados del aislamiento, así como para cualquier otro problema de índole emocional, no dudes en ponerte en contacto conmigo.
A pesar de la cuarentena, seguimos abiertos en la modalidad online. Puedes realizar terapia a través videollamada o llamada telefónica. El método de trabajo es igual que en las sesiones presenciales, la diferencia radica en que no necesitas salir de casa, ni desplazarte a Santander para tener una cita. Lo único que necesitas es tener cerca un teléfono, tablet u ordenador y concertar una cita en el horario que mejor se adapte a tus necesidades.
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